¿Cuántas veces has descubierto el sexo de un recién nacido por el color de su ropa? O ¿cuántas veces has visto en la televisión anuncios de juguetes en los que la protagonista es una niña si hablamos de muñecas o un niño en el caso de carreras de coches? Teniendo aún tan arraigados estos conceptos en nuestra sociedad. Hoy, hablamos sobre cómo ayudar a que nuestros hijos crezcan en un entorno libre de estereotipos de género.
Comienzan a descubrir si son niños o niñas
En nuestra cultura es común que los pequeños asocien al sexo significados y estereotipos que van asumiendo y aprendiendo a medida que van creciendo y su relación con el entorno es mayor. Alrededor de los 2-3 años, los niños comienzan a descubrir las características particulares de su cuerpo en diferencia a los cuerpos de género distinto, estas diferencias son puramente físicas, del resto se encarga el ambiente y entorno en el que el niño se cria.
Cada pequeño construye el significado de ser niña o niño a través de la observación y de los mensajes que recibe sobre qué es propio o impropio para cada sexo. En el día a día, los niños se encuentran con muchos mensajes estereotipados, en ocasiones muy sutiles, pero que implican que haya una barrera a la hora de desarrollarse libremente en un futuro.
¿A qué tipo de mensajes nos referimos?
La sociedad va cambiando poco a poco y nuestros pequeños también tendrán la oportunidad de ver por la calle dos hombres abrazados, dos mujeres que se besan, abuelos que cuidan de sus nietas, madres que van a trabajar, mujeres que llevan el pelo corto y hombres que se lo dejan largo. Esto les dará la oportunidad de conocer otros modelos de ser hombre y mujer menos estereotipados, lo que les permite crecer con mayor libertad. Aún así, queda mucho recorrido en un mundo en el que los esterotipos están en cada campaña de publicidad, en cada anuncio que vemos e incluso en la cabeza de cada uno de nosotros.
Hablemos de cuentos infantiles
El cuento es la primera toma de contacto de los niños con la literatura. A través del cuento se inculcan valores dominantes, y se socializa a los niños, es uno de los recursos más importantes y potentes del que padres y maestros disponemos. La primera toma de contacto suele ser con los cuentos tradicionales, esos cuentos cargados de fantasía y tan integrados en nuestra sociedad.
Pero las investigaciones nos muestran el alto contenido sexista que encontramos en estos inofensivos cuentos infantiles. Como por ejemplo:
Por suerte, estos cuentos tradiciones tienen una segunda oportunidad y cada vez podemos encontrar más y más cuentos infantiles que nos hablan de valores reales y coherentes con la sociedad en la que vivimos. Un ejemplo es una colección muy interesante titulada “Érase dos veces…” donde el papel de la mujer en el cuento clásico ha dado un gran giro y podemos encontrar a protagonistas valientes, que no esperan a que las rescaten y que se niegan a depender del hombre. Son cuentos recomendados en la mayoría de las ocasiones para mayores de 4 años, pero merece la pena tenerlos en mente para cuando nuestros pequeños crezcan.
Leímos, en un artículo que la asociación de padres y madres de un colegio de Barcelona, había decidido retirar de la biblioteca infantil del centro más de 200 cuentos por su alto contenido machista y cargado de estereotipos. Las familias argumentan que en la etapa tan temprana los niños no tienen capacidad crítica y pueden absorber y asimilar con naturalidad comportamientos machistas. Por otro lado, existían opiniones respecto a la necesidad de no borrar esta parte de la literatura ya que, y cito textualmente “Todavía hay mucha ratita que limpia la escalera o que lleva la carga del hogar, así que es normal que estos libros existan y que reflejen esta realidad. No podemos esperar que ahora mismo todos los libros sean transgresores. A lo mejor le estamos pidiendo a la literatura que vaya por delante de la sociedad”. ¿Es cierto que pretendemos ir por delante de lo que somos como sociedad o es necesario que comencemos a movernos y a realizar acciones como la de la asociación de padres?
Claves para evitar actitudes sexistas en la primera infancia
La educación dentro del núcleo familiar es imprescindible para que los niños adquieran actitudes más tolerantes, respetuosas y más igualitaria. En el día a día existen pequeños microhábitos que aún siguen siendo potenciales y que podemos ir cambiando, como por ejemplo:
El mundo de los esterotipos y la desigualdad de género en nuestra sociedad es un tema actual, que genera controversia y sobre todo delicado donde parece complicado avanzar, os dejamos un enlace a una charla TED que sin duda os recomiendo que escuchéis https://bit.ly/3eDakOy
Y vosotros, ¿qué hacéis en el día a día para reducir estos estereotipos? ¿Os habíais parado a pensar en este tema? ¡Os leemos!